A partir de 2019, nuestro laboratorio se centra en el desarrollo de sensores de hidrógeno. Aunque se han estudiado y publicado diversos sensores de hidrógeno, como los catalíticos, a nivel de laboratorio, las entrevistas con empresas y los estudios de mercado han revelado que sólo hay dos tipos de sensores en uso práctico: los de combustión por contacto y los de conducción térmica de gas. Sin embargo, el hidrógeno es un gas inflamable y los sensores que utilizan circuitos eléctricos siempre tienen el riesgo de ignición debido a las chispas. Sin embargo, no existe tal preocupación si se utiliza la luz, por lo que estamos intentando realizar una detección totalmente luminosa del gas hidrógeno conectando un sensor de micro-resonador óptico a una fibra óptica, inspirado en el esperado sensor termoeléctrico.

La investigación de los sensores está orientada a las necesidades, por lo que es necesario llevar a cabo pequeños proyectos con poco trabajo. En el pasado, hemos obtenido grandes presupuestos de investigación, pero hemos confirmado en ocasiones que es importante trabajar con ligereza en el trabajo a pie, por lo que estamos trabajando en este proyecto de investigación con una concepción libre y haciendo hincapié en un trabajo a pie ligero, en lugar de convertirlo en un proyecto completo.